El jueves 7 de septiembre de 2017 se registró un sismo de magnitud 8.4 a las 23:45 horas, con epicentro en las costas de Chiapas. Al día siguienteel gobierno mexicano emitió la declaratoria de emergencia extraordinaria para 122 municipios de la entidad.
Autoridades de Protección Civil de Chiapas informaron que 80 mil 508 casas fueron afectadas, de las cuales 58 mil 168 tienen daños parciales y 22 mil 340 sufren daño total. Los daños de mayor intensidad se dieron en los municipios de Villa Flores, Villa Corzo y Jiquipilas. En los 15 días posteriores se registraron 3,170 réplicas. Y no se descarta que se continúen presentando más movimientos telúricos.
Las afectaciones registradas por las autoridades en infraestructura educativa son las siguientes: 1,534 escuelas con daño parcial y 86 con daño total. Otras edificaciones con algún grado de daño fueron:71 unidades médicas, 194 edificios públicos, 411 iglesias, 658 comercios, 282 tramos carreteros estatales, 67 puentes dañados, 100 carreteras federales, 92 alimentadoras y 4 puentes federales, según los reportes de Protección Civil de Chiapas. Asimismo tienen afectaciones 15 servicios de electricidad y 50 de agua potable y alcantarillado.
Las autoridades estatales informaron que se tiene el reporte de 16 personas fallecidas y 26 personas lesionadas de los municipios de San Cristóbal, Jiquipilas, Villa Corzo, Pijijiapan, Tonalá, Suchiapa, Villaflores, Chiapa de Corzo y Cintalapa.
México se encuentra en una zona de alta sismicidad debido a la interacción de cinco placas tectónicas: Norteamérica, la de Cocos, la del Pacífico, la de Rivera y del Caribe. El Servicio Sismológico Nacional, organismo dependiente del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México reporta en promedio la ocurrencia de 40 sismos por día. Chiapas y Oaxaca son de los estados con mayor sismicidad en el país, por el contacto convergente entre las placas Cocos y la de Norteamérica.
Cuando ocurre un sismo de magnitud considerable las rocas que se encuentran cerca de la zona de ruptura sufren un reacomodo, lo que genera una serie de temblores en la zona que reciben el nombre de réplicas. El número de las réplicas puede variar desde unos cuantos hasta cientos de eventos en los próximos días o semanas de ocurrido el temblor principal.
El Sismológico Nacional recordó que hasta la fecha no se cuenta con técnicas científicas en ninguna parte del mundo que puedan determinar cuándo o dónde ocurrirá un sismo ni su magnitud o efectos en la población. En ese sentido, destacó la importancia de estar informados acerca de estos fenómenos naturales será de gran utilidad para mitigar el riesgo sísmico en caso de un evento de este tipo.